El único orador del acto del 9 de julio de 1816, Ernesto Gavier, presidente del Concejo Deliberante, destacó la acción de los congresales en Tucumán, entendiendo que “la declaración de la independencia, era absolutamente necesaria”.
Dio lectura completa del acta y la Declaración de la Independencia en el Congreso de Tucumán el 9 de julio de 1816, firmada en el histórico salón de aquella casa, remarcó, “que es todo un símbolo de unión y libertad de los argentinos”.
En la parte final, recordó de forma íntegra la “Oda por el sesquicentenario” de Jorge Luis Borges, donde en su última parte dice:
Nadie es la patria, pero todos debemos
ser dignos del antiguo juramento
que prestaron aquellos caballeros
de ser lo que ignoraban, argentinos,
de ser lo que serían por el hecho
de haber jurado en esa vieja casa.
Somos el porvenir de esos varones,
La justificación de aquellos muertos;
nuestro deber es la gloriosa carga
que a nuestra sombra legan esas sombras
que debemos salvar.
Nadie es la patria, pero todos lo somos.
Arda en mi pecho y en el vuestro, incesante,
ese límpido fuego misterioso.